VIAJE EN EL TIEMPO

¿ Quién no conoce los viajes en el tiempo de Martin McFly en la famosa trilogía de los años 80? ¿Y quién no recuerda, gracias a ella el DeLorean ?
Coche estrafalario donde los haya, pero no podía quedar mejor que en esas películas. Con sus formas, parecía, eso, una especie de coche del futuro o , ya de paso, una nave voladora.

El sueño  de John DeLorean fue recibido con un poco de rechazo. De todas formas eran bien entrados los años 80 cuando se empezó a producir en serie en Irlanda. Lo cual dificultó mucho su proyecto.
La leyenda dice que tuvo que involucrarse en el tema de las drogas para salvaguardar la compañía. El caso es que el juez falló a su favor pero cayó en bancarrota.

Hoy se ha recuperado el modelo ( sólo hubo un único DMC -12) y se está trabajando en él para que funcione mediante motores eléctricos.

Aquí va el artículo, no sin antes decir dos cosas............

La primera es que me perdoneis por haber puesto condensador de flujo cuando es "de fluzo" ( pequeñez que algún friki me corregirá)
y la segunda es que mañana haré una buena entrada sobre lo que he hecho hoy:

DRIFT en el circuito de Jumilla. Tengo vídeos para dar y tomar así que haré un montaje ( porque hubo más trompos que otra cosa ), pero ha sido DIVERTIDÍSIMO.

Aquí va el artículo:

                                            REGRESO AL PASADO

Quizás este título no os suene u os parezca erróneo, pero,¿ y si lo cambiamos por “regreso al futuro”? En cualquiera de sus tres partes, el jóven Michael J Fox,o, Martin Mc Fly conduce un coche muy especial. Se trata de un DeLorean DMC-12. En la propia película, el protagonista se extraña pues es un modelo ( y era entonces también) muy poco habitual de ver. Más bien parecía un prototipo, algo muy “futurista”.

Su historia comienza a finales de los 70, pero fue en los 80 cuando se dio a conocer al público (en principio estadounidense a pesar de ser fabricado en Irlanda). Pero la empresa DMC se declaró en bancarrota después de que su dueño fuera acusado por tráfico de drogas en un intento de sacar adelante la compañía. Durante unos años se volvieron a fabricar algunas unidades, pero en pequeña cantidad. Quizás el diseño chocó con las puertas de alas de gaviota, o el propio aspecto general, no entraba en la mentalidad americana de entonces. Tenía un motor de 6 cilindros en V que desarrollaban 130cv (los Muscle Cars iban ya por más de 400), y se ofrecía con cambio manual de 5 velocidades o automática de tres. Su precio no era nada desorbitado: 12000 dólares de salida.

Pero en 1986, la película de Robert Zemeckis, hizo que el coche se convirtiera en una leyenda. La verdad es que cuadraba en lo que se refiere a coche de otra época. 5 unidades “modificadas con el condensador de flujo” se produjeron para el largometraje.

Hoy en día se ha recuperado esa carrocería y se está trabajando para producirlo en serie, pero esta vez con un motor eléctrico. Sólo se fabricarán 300 unidades.

Tal vez fuera algo inesperado en su época, tal vez la gente no estaba preparada para él, pero de lo que no cabe duda es que pasará a la historia.