EL COCHE DE MIS SUEÑOS

Es complicado tener un coche ideal en concreto en la mente. Yo creo que esto depende mucho de las circunstancias y del momento en el que estamos pues las necesidades no son las mismas todos los días y podríamos desear que el coche actual fuera un coupé deportivo como al día siguiente una berlina de 5 plazas y buen maletero ocupara la plaza de aparcamiento de casa. Eso suele pasar mucho cuando una persona soltera pasa a tener mujer e hijos y tiene que cambiar su esquema, sí o sí. Bueno, también está para esos hechos algo como el Audi RS6 Avant V10, que en principio es multipropósito, aunque los niños acabarían vomitando en las curvas y limpiar el cuero cada dos por tres sale bastante caro. Preferiblemente un Opel Insignia Sports Tourer 1.5 XFL ecoTEC ocuparía ese espacio y resultaría más razonable su compra a la postre. Pero igual que te casas te divorcias y te queda un 50% de tus posesiones y los niños tienes que verlos los fines de semana lo cual te hace pensar que tal vez un Porsche Cayenne Turbo S haría que los hijos dijeran más a menudo "queremos estar con papá que tiene mejor coche".

Vale es un poco heavy el ejemplo y puede que un poco inadecuado pero me sirve para mostrar dos extremos que se pueden alcanzar en cuestión de tiempo, evidentemente no es de la noche a la mañana y nadie desea un final así. El caso es que, cuando eres niño sueñas con un coche que has visto en la tele, una revista o por la calle. Te enamoras o simplemente lo ves diferente y te identificas con él. Lo ves como el sueño que quieres perseguir y que un día (con 18 años por ejemplo) sea tuyo. Pues sí, pero el día de adquirir uno te puedes ver con el Peugeot 306 de tu padre como regalo y se apaga en parte tu ilusión. Y la meta es siempre la misma, tener un montón de dinero para poder permitírtelo. 

Las cosas son así, el que tiene 200 millones de euros puede comprarse hasta el concesionario para hacer negocio con él luego y ganar aún más pasta. Por desgracia es cierto, cuanto más dinero, más dinero quieres y así hasta que te pillan por estafa y fraude yendo a la cárcel sin pasar por la casilla de salida.

También existe el garaje de Jay Leno, que es exagerado, pero al menos el tío no tiene problemas para desplazarse si de repente le fallan 50 coches por pura casualidad❓❗. Pero, ¿quién no quisiera tener su garaje tipo Leno?

Suele ser muy común el sueño de tener varios coches en posesión aunque no sea en un mismo lugar. El hecho precisamente de cada día, semana o mes tener una necesidad particular hace que el coche único pase a un segundo o tercer plano.
Recuerdo el caso de un jeque árabe que tenía el mismo Mercedes 190 de diferentes colores, uno para cada día de la semana. "Hoy me siento despejado como el cielo azul, voy a coger el "aquamarine blue" para ir al casino" "Mañana tengo reunión con los jefes de estado, pillaré el amarillo fuego para llamar más la atención". Menos mal que hoy día los coches cuentan con las luces de iluminación ambiental de diferentes tonos.

Bien, dicho esto me toca hablar en primera persona y contar mi propia experiencia relativa a este tema:



Para empezar he de decir que soy un inconformista y lo mismo a los tres años estoy cansado del alto consumo de un Nissan 350Z (la pregunta es: ¿¿¿para qué te has comprado un 350Z entonces??)? y lo sé, por desgracia estos planteamientos los veo venir y no salen muy rentables. Por cierto, la famosa pregunta-intriga "¿porqué vendiste el 1M coupé?" sigue siendo una incógnita hasta para mí mismo. Más bien yo me planteo "¿qué cojones se me pasó por la cabeza hace 4 años?", en fin, misterios sin resolver....

La gente que es menos impulsiva también desea cambiar o tener un segundo coche que es lo más lógico con el tiempo sea por un desgaste del coche principal importante como un nuevo automóvil para poder desplazarse por caminos abruptos, consumir mucho menos o realizar ese pedazo de compra semanal que requiere un maletero de unos 500 litros por lo menos (lo que viene a ser un SUV).

Por cierto, ¿alguien sabe realmente el verdadero sentido de un SUV? Parece el coche para todo pero lo veo como la excusa más inútil hoy en día para poder hacer el día a día en la ciudad y usar sus dotes de todoterreno por si hay que ir a ver a los abuelos de Casa Tarradellas al monte cada verano. Eso tiene menos fuste que alquilar una moto de agua para pescar en alta mar. Los SUVs no son todoterrenos, pueden meterse en un camino de rocas pero no salir luego, por mucho "Grip Control" que tenga (véase el ejemplo del Peugeot 3008 con control de descenso de pendientes tan eficaz). Las cosas como son, un superdeportivo no es el coche para ir a esquiar a Sierra Nevada o perderse por un bosque de esos típicos americanos donde te puedes encontrar con la chica de la curva o la bruja de Blair haciendo autostop 👻.

Volviendo a la realidad en Europa y España que es donde más puedo indagar, es evidente que por mucho motor turbo y una cilindrada de 2 litros, el Seat León Cupra 2017 de 300cv no es un coche para consumir 6 litros de media y llenar el depósito cada tres meses (con un uso diario, claro). Aunque tenga 5 plazas, un maletero y habitáculo de coche de segmento C no lo veo como inversión a largo plazo para ahorrar lo máximo posible en combustible a final de mes. Igual que un diésel no es una maravilla de la ingeniería que protege el medio ambiente repoblando los bosques por sí mismo. Por mucho que ponga "Eco" el aire negro que sale por el escape al acelerar es la misma mierda que reduce las posibilidades de vivir 100 años más en la Tierra.

En fin, sigo en lo mío que estoy desvariando, digo, variando el rumbo del artículo 💫. Cuando tenía 7 años me dije a mí mismo que el Golf III VR6 sería mi primer coche. Qué cosas tiene la vida, no sabía que acabaría odiando tanto un VW Golf. Ese fue mi primer plan de vida para cuando fuera adulto. Luego empecé a descubrir el mundo de la alta gama y la exclusividad de los deportivos de altas prestaciones, sólo que ni de coña soñaba con tener un Ferrari 550 Maranello a los 18 años. Sí más adelante, como cuando te haces pajas mentales pensando "me convertiré en un hombre de éxito y tendré 6 coches, un castillo en la casa de campo de Madrid, diez hijos y una mujer de infarto". Ni el genio de la lámpara puede concederte ese deseo, pero te motivas y lo das todo...

Hasta que de repente tres años más tarde ves un Porsche 996 Turbo y te cambia el esquema, automovilísticamente hablando por supuesto, lo demás sigue intacto. En mi caso no me enamoró el 996 Turbo, sí el 550 Maranello, pero como decía jugaba en otra liga. En términos de éxito, poder y dinero llegué a verme como un importante empresario, viviendo con María (del colegio, madre mía, no hay cosa más preciosa en el mundo, ni coches ni nada😍😍😍) en un chalé a las afueras de la ciudad y por tanto mi coche era un BMW 760i e65, un V12 con presencia y maletas de Louis Vuitton en el enorme "trunk".

Dejó de gustarme la ostentación y el mundo yuppie (no confundir con los mundos de Yupi) así que me fijé en los compactos deportivos como primera opción. De hecho en el 2000 apareció el Alfa Romeo 147 y me obsesioné😮 con él. En fin, era obvio que entre un Nissan 350Z 3.5 V6 280cv y un Alfa Romeo 147 1.9 jtdm 150cv el segundo gana por victoria aplastante😱. Sí, fue mi momento "racional", quería un coche "normalito" para mis 18 años.

A partir de aquí ya se sabe, que si este, luego el otro, el de más allá, etc. Siempre el denominador común ha sido, como decía antes, las circunstancias en cada nuevo cambio (unos 3 años o menos de media😫). Necesito más espacio, más potencia, menos potencia, mayor capacidad de maletero, menor consumo, ahora quiero correr como un poseso (bueno eso sí que no cambia), no tengo sensores de aparcamiento...

De hecho reconozco que mi media temporal para empezar a rayarme con el coche y verle sólo los puntos negros es de 6 meses. Sí, cuando tuve el 350Z le di ese tiempo de vida, por experiencia más que nada. Y ahora que mi León FR ha cumplido 6 meses y 6 días, por supuesto que empiezo a quejarme a más no poder del cambio DSG 7 y la madre que parió los cambios automáticos. El problema es que ahora me tengo que aguantar un poco, ya no hay perras para más. Y si me comprara uno nuevo sería un segundo coche, no más compra-venta.
Lo que me consuela es que llevo más kms que lo que hacía en tres años anteriormente así que es posible que el León incluso muera "de viejo".

Efectivamente ahora quiero un coche deportivo, cupé, tracción trasera con autoblocante mecánico (nada de electrónicos), caja de cambios manual, motor sobrealimentado, a ser posible un V8 (ya empieza a estar difícil el tema), con más de 500cv de potencia y una aceleración de menos de 3 segundos. ¡¡¡¡Woah!!!!, menudo pepino imaginario, pero, eso es a día de hoy. La pregunta es: 

¿Cuánto me duraría este "carrazo"? 

La respuesta es imprecisa, por eso quiero un garaje tipo Jay Leno. Pero Jay Leno es un showman y no quiero seguir sus pasos,..... quiero... ser... un "showman", vivir en EE.UU., poseer un Emmy, un montón de coches, (modo Homer con la baba cayéndose, es que no tengo ese emoticono)....

Así que la respuesta a mi pregunta cuál es el coche de mis sueños es... nunca encontraré el coche perfecto para mí a no ser que me lo fabrique yo, y aun así no terminaría de encontrarle peros.

Lo que sí quiero es plantearos dos cuestiones esta vez:

1. Por los rasgos que he definido, ¿qué coche creéis que ahora mismo calmaría mis ansias de volver a conducir un coche que se deje conducir, eh, no lo digo por nadie "Leoncete", durante X tiempo?

2. ¿Cuál es el que coche que siempre habéis deseado o que más encaja con vuestras exigencias?

Participad un poco más, gente, que no cuesta tanto escribir un par de líneas 😆. No seáis como la vecina de dos casas más allá que coge el Mondeo para ir tres al otro lado (bueno esos niveles son muy bajos, imagino que la pobre estará cansada de bajar de la cumbre del Everest llegando directamente a su casa cada mañana🐕).

¿qué tal un coche de 750cv por ejemplo?

Os dejo el link del vídeo de título homónimo a esta entrada, como siempre a ver el canal de Youtube, a soñar, que es gratis, a dejarse la piel por un sueño o soñar directamente que falta me hace a mí por la noche, ¡¡¡y a disfrutar!!!