BENTLEY CONTINENTAL GT Y GTC 2018

Antes de nada, mirad este enlace y decidme qué opináis: jajajaja,

ratatouille

Hoy os voy a contar cosas sobre un coche que a mí, personalmente no me llama mucho la atención. Y ahora diréis: ¡ Pero si es el Bentley, un cochazo de más de 200 000 euros! Sí, pero estoy tan acostumbrado a verlos circular por la calle como si nada que ya os digo, es que ni oigo el W12 que montaban los primeros, que son los que más hay en Murcia (los de 2018 aún no he visto) y es una pena pero es que sólo van viejos en ellos pisando huevos.

En fin, supongo que es el público al que va dirigido un coche con un corazón deportivo pero una apariencia de Mercedes Clase S o parecido que no va bien en circuito a pesar de su potencia y su tracción integral pero para pasar desapercibido parece que va de lujo...


Y en estas dos versiones, la GT (coupé) y la GTC (cabriolet) el lujo es precisamente lo que importa pues recordemos que Bentley es una marca británica tipo Rolls-Royce pero que al menos con estos modelos quiere acercarse un poco más a la deportividad en la medida de lo posible.
Empiezo pues:

 Resulta que ya estamos ante la tercera generación de este modelo (aunque parezca mentira, yo diría restyling y punto porque son extremadamente parecidos), pero la primera, que data de 2003 ni más ni menos estaba basada en la plataforma del VW Phaeton así como la segunda (2010) que no recibió muchos cambios pero esta vez han cogido la MLB Evo que reciben también el Q7, el Bentayga (misma familia) y el Panamera (con este coche habrá muchas semblanzas, ya veréis).

Empezando por las motorizaciones, sólo existen dos, igual que las versiones: como acceso un V8 4.0 Twin Turbo de 550 cv y 770 Nm de par desarrollado por Porsche que lo lanza de 0 a 100 en 4,1 segundos y alcanza 318 km/h en versión descapotable, es decir que ganará un poco en versión GT. Y si te parece insuficiente pues puedes pasar a jugar con los niños mayores como se dice y meterte en un coche con un motor W12 de 6 litros con tecnología Twin Scroll ( lleva doble turbo) que desarrolla 635 cv y 900 Nm de par desde las 1350 rpm hasta las 4500 rpm. Increíble, sencillamente increíbles números. El 0 a 100 lo hace en 3,7 segundos (no está mal para una ballena de más de 2 toneladas) y la velocidad máxima es de 333 km/h. Este último motor utiliza cuatro filas de tres cilindros dispuestas en dos bancadas separadas 15º y enlazadas a 72º para compartir un único cigüeñal. También esta disposición en W favorece el uso de una sola culata si se trata de unir dos bancadas de V6 en V estrecha lo cual ahorra en costes.

La caja de cambios es una automática de doble embrague y 8 velocidades fabricada por....Porsche (¡sorpresa! 😅) conectada a una tracción a las cuatro ruedas tipo hang on:
las ruedas traseras reciben casi todo el par motor la mayoría del tiempo, sólo cuando se detectan pérdidas de motricidad un embrague multidisco acopla el tren delantero. Por ejemplo en los modos Comfort y Bentley el 38% del par se enviaría al eje delantero mientras que en modo Sport sólo un 17%.

La suspensión es neumática con tres grados de dureza y altura variable, hay barras estabilizadoras activas y un diferencial trasero autoblocante con grado de bloqueo variable.

Si todo esto os parece poca tecnología esperad a ver el interior de esta ¿preciosidad? yo lo veo horrendo con esos faros redondos dobles....

Cuero y madera lo presiden dejando un aspecto interior impecable, como sólo Bentley sabe hacer las cosas. Nada más que los asientos pueden contar hasta (opcionalmente) con 20 ajustes distintos entre funciones de masaje, ventilación y calefacción de forma eléctrica. Madre mía, sólo falta que te haga una......     pues eso que ha cogido mucha de las funciones tecnológicas de Audi y Porsche en este apartado, incluso puede recordar a los menús en la instrumentación del grupo VW con esa pantalla en la consola central de 12,3 pulgadas, es decir que como está de moda, prescinde de botonería y las funciones de climatización, audio, etc. son digitales. El salto cualitativo en esta tercera generación es claro. La verdad es que da cosa entrar en un coche de 235 000 euros y ver botones de un Audi A3 por ejemplo. Sí permanecen en cambio los tiradores típicos de Bentley que regulan el caudal del aire o los "ojos de buey" (las salidas de ventilación circulares). Así que en parte están justificados los miles de euros que te puedes gastar en personalizar el interior a tu gusto o dejarlo tal y como viene de serie. De hecho os dejo algunos precios de opciones para que os lo vayáis pensando: la citada pantalla cuesta más de 6000 euros si quieres que te mida el tiempo por vuelta por ejemplo (cosa que yo no haría en un coche así), la tapicería de cuero bordada con diamantes 😮 cuesta casi 12000 euros y tener un equipo de audio con 21 altavoces (de nuevo 😮) te deja con 9000 euros menos en la cuenta.

Si aun así eres algo sibarita y esto es roña, el túnel central acabado en aluminio damasquinado (WTF!!), esto significa "que se utiliza un proceso de acabado de superficies mediante un cuidadoso fresado rotativo o lapeado que genera las olas de avance o Costa de Ginebra que era un elemento decorativo en los relojes de los 70 al parecer" pues desembolsa 1 936 euros. Y entonces tendrás algo de lo que no he entendido ni papa. ¿¿¿Fresado rotativo??? ¿Qué coño será eso?
Dos adultos podrán viajar detrás pero irán un pelín incómodos (por decir algo) y el maletero se queda en 358 litros.

Bueno, y ya exteriormente, bueno, el coche sigue la línea establecida por el primer modelo, sólo que los faros delanteros (con 82 leds por proyector) y los pilotos traseros cambian un poco para que se note la diferencia, algunos detalles mínimos, pero lo importante es que la carrocería de barco es de aluminio a excepción de la tapa del maletero que es de plástico reforzado con carbono e incorpora un pequeño alerón trasero como el que vemos en las fotos. Los voladizos delantero y trasero se han reducido y la batalla es ahora de 2,85 metros. El ancho del coche es de 1,94 metros!

Dinámicamente de nuevo no puedo decir nada aunque sí es verdad que esta tercera generación debe ir mucho mejor en curvas pues se ha disminuido el peso (aunque sea un monstruo) y se le ha querido dar un toque más deportivo. Yo sólo puedo decir, como de costumbre, que en el Forza Horizon se nota más agarre y va mejor. Pero claro, hablamos de un maldito videojuego así que....

Tenéis dos opciones: Comprar uno por esos 235 000 euros y descubrir qué tal va o seguir haciendo como yo y comprarlo con los créditos del juego, de las dos maneras pasaréis desapercibido para mí pues como os he dicho al principio, este es un coche fantasma aquí en Murcia y al igual que los Panamera, los hay a montones pero ni se escuchan ni se ven si te descuidas un poco. Lástima pero es así.

Bueno ,me despido de vosotros con un vídeo del bicho.
¡¡¡Hasta la próxima!!!

Bentley Continental GTC 2019